Haikus, liras, sonetos, submarinismo emocional...cine, series, baloncesto y algo de literatura; arrebatos y destellos para darle arraigo a la posibilidad. Lo mejor está por venir. A través de esa idea, vivo, disfruto y ordeno la realidad, que construimos juntos cada día :-). Un blog de Pedro Fernaud Quintana
lunes, abril 26, 2010
Futuro nuestra especie
Año 88.337 del que fue nuestro señor. En este mundo no existen dioses. Es sobre vivencia. El fanatismo religioso llevo a los nuestros al borde de la extinción. No creo que hayamos aprendido mucho desde que vosotros respirabais. La vida, ahora, se reduce en demasiadas ocasiones a aparentar lo que no eres. Se trata de engañar al sistema.
Las ciudades están circundadas de parques con vocación de selva. Los más afortunados viven en la tierra. Pero la superpoblación del planeta llevó a muchos individuos a vivir en la troposfera. Ahora mismo, se planifica el asalto a la estratosfera. En mi mundo, no eres persona hasta que lo demuestres. Nos avergonzamos de nosotros mismos.
Las ciudades son más limpias. La gente adora vivir en los pueblos, pero no es un privilegio al alcance de cualquiera. Tenemos que preservar los recursos naturales al detalle. Después de la gran hecatombe, muchas de las labores se confiaron a sofisticados robots. Últimamente funciona la discriminación positiva favorable al humano.
Somos una raza en reconstrucción. Y hay algo, como expresarlo en vuestro lenguaje, hay algo fascista en nuestro modo de organizarnos. De pensarnos. Y distribuirnos. Existe una distribución eficiente de los recursos. Pero la gente tiene casi prohibido pensar por si mismo. El miedo es el dios de nuestros días, y aunque no es una realidad del todo nueva, enerva que detrás de tanto progreso, habite una confianza hecha papilla.
Lo siento, amigo, pero la Alemania nazi no fue un horror aislado. En este mundo existe una humanidad de tres velocidades. Sigue primando el poder de los recursos. Tanto tienes, tanto vives. La gente vive hasta los quinientos años si puede costeárselo. Dietas hipersaludables. Drogas sin efectos secundarios. Infinitas caras con los labios y los ojos de diosas de la primera historia. Pero nos falta alma. Algo individualista y hermoso.
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2 comentarios:
No por Dios, yo no quiero ese mundo...
Bueno, no todo será tan negativo en el futuro. Tendremos que seguir leyendo para averiguar qué nos aguarda...
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