jueves, mayo 21, 2020

'La cervantina': música, irreverencia, diversión y ritmo para visitar la quintaesencia de Cervantes


Fuente de foto: Blog Literario

Estos días estoy aprovechando para sumergirme en algunas de las obras más sobresalientes del teatro español, antiguo y reciente. En esa categoría, figura con luz propia 'Cervantina. Versiones y diversiones sobre textos de Miguel Cervantes'.

La obra está estructurada a partir de fragmentos elaborados por Miguel de Cervantes Saavedra (Alcalá de Henares, 1547-Madrid 1606). A saber: 'El celoso extremeño', 'El coloquio de los perros', 'El hospital de los podridos', 'El licenciado Vidriera', 'El retablo de las maravillas', 'Don Quijote de la Mancha', 'El viejo celoso', 'La Galatea', 'La gitanilla', 'Prólogo de Novelas ejemplares', 'Persiles y Segismunda', 'Rinconete y Cortadillo' y 'Viaje del Parnaso'.


          Fuente de foto: Ayuntamiento de Manzanares

El arranque de la obra es sencillamente magistral: en él se nos muestra un atribulado Cervantes dialogando con la musa, quien, tras unos coquetos y divertidos requiebros (es admirable la gracia con la que el elenco masculino de la compañía borda los personajes femeninos), le distingue con su favor, al tiempo que le advierte de que no podrá disfrutar de la mayor parte de los ecos de su excelencia en vida...ese juego metaliterario, en el que se bromea con lo que fue y lo que es, lo que sucedió y lo que ocurrirá, es uno de los aciertos recurrentes en diferentes tramos de esta representación teatral.

Quizás no todo el mundo lo sepa: Cervantes compuso la mayoría de sus obras en plena madurez, habría traspasado con amplitud los 50 años (y no es descabellado pensar que, al igual que el principal héroe cervantino, padeciera eso que Javier Gomá, ensayista bilbaíno y director de la Fundación Juan March, denomina el demonio del mediodía…algo así como un anhelo torrencial de realizarse en el tramo otoñal de su vida,  aunque para ello tuviera que desdibujar las fronteras entre realidad y fantasía).

El caso es que el talento de Cervantes, su lucidez, viene de haber vivido a fondo las diferentes experiencias que le deparó su existencia; ya fuera una batalla en Lepanto, un cautiverio en Argel, una recaudación de impuestos en la Puebla de Cazalla, una entrega absoluta y absorbente a la escritura los últimos años de su vida…Cervantes se consagró a la vida en sus más diversas formas y ese compromiso con los días transpira en toda su obra literaria, tan bien sintetizada por los integrantes de la compañía teatral Ron Lalá, que para esta obra trabajaron en sintonía con la Compañía Nacional de Teatro Clásico.
Viendo la representación de los textos y la metadramaturgia que conforman 'La cervantina', creo que también quedan de relieve las dificultades que tuvo que sortear el genio alcalaíno para vivir con cierta dignidad, lo que fortaleció su conciencia social.

'La cervantina' rezuma chispa, ingenio y diversión. Resulta prodigiosa la manera en la que se funden textos, interpretaciones, música y humor (en la obra se interpretan varias perlas, que no tienen nada que envidiar a las chirigotas de Cádiz). Es un regalo que la musa de Cervantes nos brinda a todos. A ese 30% de españoles que según las estadísticas ha leído íntegro el Quijote, y a ese 70% que no.

Porque Cervantes es mucho más que su insigne hidalgo, adalid de la justicia y el idealismo, y su fiel escudero.



Fuente de foto: Ron Lalá

Hay un caleidoscopio de miradas y humores cervantinos que trascienden a su tiempo. Cervantes brinda humor y conciencia social en los pasajes de 'Rinconete y Cortadillo', es también precursor del cine de animación y de la fantasía en forma de fábula, con su 'Coloquio de los perros', y qué decir de su alegato antirracista de 'La gitanilla', también conmueve con su compasión y tono certero para retratar a los personajes a los que dibuja, como esa Pastora Marcela, que emerge en una ribera de Don Quijote de la Mancha, pionera de la libertad y el feminismo.

La Cervantina fue premio Max (que son algo así como los premios Goya del teatro español) 2017 al Mejor Espectáculo Musical. La obra está dirigida por Yayo Cáceres y está interpretada por Juan Cañas, Miguel Magdalena, Álvaro Tato, Daniel Rovalher e Íñigo Echevarría.

Otra cualidad a resaltar de esa representación es el ritmo con el que se escenifica, así como el tono pícaro y simpático que revelan las interpretaciones de los actores. Unos intérpretes que se revelan como virtuosos, tanto de  la declamación como de la interpretación de los instrumentos y el canto.



Fuente de foto: teatralia.es

Otro elemento que me ha parecido interesante de la obra es el eje participativo que se teje con los espectadores en varios momentos de la representación. Un público al que de convierte en elemento activo de la función, y con el no se mecanizan las respuestas…

En la función que emitieron el pasado jueves 14 de mayo en la 2 de RTVE, se emplea, por ejemplo, el ingenio para contrarreplicar a un espectador que habla de que para él todo está bien, y se le reprocha cordialmente su conformismo…
Hay reverencia, hay picante y también hay cortesía… En sintonía con el ideario del propio  Cervantes, que decía “un caballero se avergüenza de que sus palabras sean mejores que sus hechos".

Los hechos, las interpretaciones de estos trovadores actuales, exprimen la admiración del público, que les rinde una merecida ovación al final de la obra.
'La cervantina' funciona en muchas capas: es entretenimiento, comedia, drama y teatro de denuncia social en un mismo latido.

Se denuncian males que parecen enquistados en el alma colectiva española: corrupción, envidia, racismo, incultura e ignorancia. Aunque, simultáneamente, se expresan también posibilidades que parecen permanecer a lo largo de los siglos en nuestra realidad y  horizonte de futuro: la solidaridad, el humor, la cercanía, la bondad, el feminismo, la alegría de vivir y el canto sensual a la vida, irreverente y delicado a un tiempo.



Fuente de foto: Ayuntamiento de Rivas

Me temo que esta obra de teatro finalmente ha conseguido inocularme el preciado virus cervantino que anuncia durante su parte final: el anhelo de libertad, la necesidad de ejercitar el librepensamiento y el cultivo de la sensibilidad cultural y social… Herramientas que ayudan a interpretar y construir una realidad con más matices, juego y perspectiva.

Disfrútenla. En este enlace pueden visitarla estos días, en la sección de A la Carta, en la web de Radio Televisión Española. 

No hay comentarios: