Fuente de foto: cervantesvirtual.com
La Fundación (1974) es una de las obras más celebradas de
Antonio Buero Vallejo (Guadalajara 1916-Madrid 2000), posiblemente el
dramaturgo más excelso del teatro español del siglo XX junto a García
Lorca y Valle Inclán, autor de obras tan geniales como Historia de una
escelara, Ardiente oscuridad o la obra que da pie a esta breve
meditación.
En síntesis, la Fundación cuenta la historia de un grupo de
hombres que conviven en una estancia. Al inicio de la obra, nosotros,
como público, miramos su situación desde la perspectiva de Tomás. Así
pues, en un primer momento, pensamos que viven en una fundación del
futuro, equipados con todas las comodidades y lujos propios de una
sociedad avanzada.
Fuente de foto: rtve.es
Sin embargo, conforme discurre la obra, descubrimos que en
realidad su situación es bien distinta (hasta ahí podemos leer). He
podido ver la obra en la versión de la obra en el espacio A la carta de RTVE, a través de su espacio Estudio 1 y con la rúbrica en
la dirección de José Osuna y en la escenografía de Vicente Vela, y con
elenco en el que participan los actores Francisco Valladares, Jesús
Puente, José Albiach, Victoria Rodríguez, Pablo Sanz, Eric Arredondo y
Ernesto Aura.
La obra administra con pulso la intriga. Crea sensaciones
que transitan desde el gozo inquieto al conflicto, con un in crescendo
difícil de digerir hasta que empiezan a colarse por los pliegues de
algunos personajes (mucha atención al personaje de Asel, interpretado
por Jesús Puente) su humanidad.
Es una historia que combina magistralmente la ciencia
ficción, el compromiso social y la mirada filosófica. Un caleidoscopio
lleno de aristas cuyo espíritu evoca El mito de la caverna de Platón o,
para los cinéfilos, la saga de Matrix. Es decir, nada es exactamente lo
que parece. Y solo cultivando una mirada autocrítica y crítica podremos
salir del mundo ilusorio en el que transcurren partes importantes de
nuestras existencias, a veces tan alejadas de lo esencial, aquello que
da sentido y felicidad a nuestras vidas....
¿Y qué es lo esencial de una existencia? En esta obra se
deslizan algunas propuestas interesantes: la solidaridad, la amistad y
la búsqueda de cierta coherencia entre lo que uno piensa y siente, y lo
que hace... En un equilibrio que pone de acuerdo lo personal y lo
social...
Gracias Buero. Seguimos aprendiendo...
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