...Cuentan que hubo un tiempo en el que la gente tenía frío por fuera y por dentro. En aquella época, la humanidad estaba hecha de pedernal y resentimiento...Pero un grupo de personas, un puñado de inspirados, descubrió que la verdadera felicidad viaja por dentro. Guiados por esa máxima, decidieron convertir la época más fría del ciclo estelar en un lugar para la ilusión.
Y como destinatorios principales de esta calidez escogieron a los más pequeños. ¿Qué mejor manera de cambiar una tendencia de abatimiento que sembrando la alegría en los recién llegados? Gracias a ese atrevimiento, hoy día no son pocos los niños que cultivan el asombro y la esperanza durante estas fechas, un periodo de alegría y gratitud que, con un mucho de suerte, puede prolongarse hasta que ese niño alcance la madurez, hasta que esa niña se haga mujer y reparta sonrisas y calidez entre la gente a la que quiere o que siemplemente le rodea...Una mujer que, quien sabe, como profesora puede incidir hoy día en la renovación de ese ciclo, donde los valores, algunos valores, forman la constelación primordial que nos orienta...
Que bonito Pedro, me encanta lo de la profesora y los valores, en estos tiempos es la parte más importante de nuestro de trabajo para que los más jóvenes, y no tan jóvenes no decaigan y tengan ilusión y fuerza...ahora mismo lo más importante
ResponderEliminarSoledad
Muchas gracias Soledad. Completamente de acuerdo contigo. Feliz año nuevo!
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