domingo, junio 14, 2009

El presidente que anda como si estuviese escuchando a Charlie Parker


Después vino el largo asalto a la presidencia, donde desbarató las previsiones y acabó por poner a Hillary trabajando a su lado. También, las explosiones de entusiasmo que generaba su oratoria y su dudoso gusto para hacer según que chistes mientras, eso sí, exhibía una simpatía natural ganadora para ganarse la complicidad del camerano o el obrero con el que conversaba en medio de una extenuante campaña.

Ganó, el mundo se encendió. Y de momento no ha defraudado demasiadas expectativas. Obama consigue los primeros puntos cuando desciende por la escalerilla del avión. Ha decidido no tomarse muy en serio a sí mismo. Baja como si estuviese escuchando a Charlie Parker, con ese ruido interior que provoca un elegante movimiento.

Luego, en el cara a cara, no tiene problema en sonreír y choca las manos. Mientras habla de multilateralismo y cooperación necesaria, exhibe una habilidad inaudita para cartografiar los puntos de vista del otro.

Humillación palestina y la crítica como herramienta honesta

El otro día empezó a ganarse el corazón de esa gente que vive en el corazón del odio y el misticismo de la humanidad, Oriente Medio. Habló del sufrimiento y de la humillación de los palestinos. De su intolerable situación de abandono. Al tiempo, señaló los lazos irrompibles con Israel. Evocó el exterminio de millones de judíos y su derecho legítimo a tener un estado mientras argumentaba la crítica, con aquello de que los amigos honestos son aquellos que también te dicen cuando te equivocas.

Hablando de amigos, este par de posts se los dedicó a Davide, que en los últimos meses me ha preguntado varios millones de veces: Peeeeeeeeeeeete, para cuando un post de más de 5 palabras?, pues aquí lo tienes compañero, gracias por tu insistencia, sin ella quizá me hubiera abandonado para siempre a los brazos de las musas del vino poético.

Un educado corte de mangas a los empresarios petroleros


Obama ha cerrado (lo intenta al menos) Guantamano, le ha pegado un educado corte de mangas a los viejos empresarios petroleros que tanto disfrutaban con las prebendas de Bush (y la subsiguiente contaminación planetaria). Ha dado luz verde a la investigación de las células madre. Se ha reconocido cristiano como el que más, pero ha sabido entender que en una sociedad del siglo XXI los poderes tienen que estar separados…

Para que haya llegado Obama, que combina el lenguaje de un chico de barrio con el de un profesor de Harward, ha sido necesaria no sólo una crisis económica, sino moral. El mandamás que nació en Hawai habla de respeto, exigencia, ética, trabajo diario y cosas extraordinarias hechas por gente normal. Difícil no estar de acuerdo.

5 comentarios:

  1. Anónimo2:11 p. m.

    Interesantes incursiones en el universo obamiano. Me darán qué pensar durante unas cuantas tardes ahora que el calor aprieta en la celda.

    Pancracius

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  2. Anónimo11:14 a. m.

    Grazie, Acius, no desesperes, piensa que tus sueños de libertad te llevarán a salir más pronto de lo que esperas.

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  3. Anónimo4:37 p. m.

    Me ha gustado mucho tu post, creo que las palabras (y las acciones) de Obama podrán inspirarte en futuros post.
    Espero que su naturaleza política no se imponga y comience a caer en demaogias y populismos, aunque no creo... los americanos son más serios que nosotros y allí eso no funciona.
    SGR

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  4. Anónimo5:26 p. m.

    Pito:

    me alegro de que hayas vuelto a la senda de los posts centenarios en palabras ¿para cuando uno con las luces y sombras del niño de Masnou?

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  5. Anónimo12:17 a. m.

    Muchas gracias Sergio, celebro que te haya gustado. Tampoco me fustigaría tanto, haber nacido aquí también tiene un puñado de ventajas como para sentirse (a veces) orgulloso.

    Davideeee, ese post sobre el niño genio se está cocinando, un día de estos lo verás aquí. Antes, eso sí, toca uno del tío Pau.

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